País:
Estados Unidos.
Director:
Rob Zombie.
Género:
Brujas.
Sinopsis: ‘‘Heidi (Sheri Moon Zombie), una DJ de una
emisora de radio, recibe una misteriosa caja de madera que contiene un disco,
"un regalo de los señores". Heidi lo escucha y los extraños sonidos
que surgen de sus surcos provocan inmediatamente flashbacks del violento pasado
de Salem. ¿Se está volviendo loca Heidi, o es que los señores de Salem
pretenden regresar para vengarse de la Salem actual?’’
Por
fin logré ver Lords of Salem (2013).
Puedo afirmar que no es la película de terror del 2013. Ni mucho menos el mejor
exponente de este tipo de temáticas, ya que el trono lo ostenta American Horror Story: Coven (varios directores, 2013) con muchísima
diferencia y sin recurrir a polémicas sobre la Iglesia Católica ni Satanismo,
que no me hace meollo ni me molesta, pero el señor Zombie lo toca de una manera
muy manida y superficial que aburre con lo mismo, es más, suena más provocadora
la línea del sacerdote de Scary Movie 2
cuando la madre de la poseída dice ''ni siquiera deja que la toque'' y el
personaje dice ''algunas ocasiones hay que darles dulces para lograrlo''. Sheri Moon Zombie es guapa y saber
actuar cuando el papel lo exige, no por nada puede hacerte sentir escalofríos
con Baby en House of 1000 Corpses (Rob Zombie, 2003)/ The Devil’s Rejects (Rob
Zombie, 2005) o puede lograr que le tengas lástima con Deborah Myers en el remake de Halloween
(Rob Zombie, 2007), pero aquí su Heidi/Elizabeth
no logra nada, mucho menos con esos desnudos demasiado gratuitos (marca de la
casa, tirando a Milla Jovovich en
casi toda su filmografía), pero no repudio esos desnudos, carajo no, aquí esas
tomas dejan demasiado mal parada, luce muy mal y los que hemos visto películas
del hermano Rob sabemos que siempre la hace lucir hermosa y sensual... Aquí
simplemente no sucede.
Los
personajes vienen y van. Son más interesantes esos sueños lúcidos de la
protagonista (que a veces ni se siente con tal peso en la historia) que lo
transcurrido ''realmente''. Los diálogos cargados de referencias a la vagina,
la suciedad, el sexo asqueroso y a Satán... no solamente aburren o molestan,
sino simplemente cansan, es decir:
‘‘Puedo
saborear el fétido aroma de sus corruptos antepasados en los pliegues de
suciedad entre sus piernas. ’’
SÍ, HERMANO ROB, SÍ. Ya sabemos que es una película tirando a Serie B, homenajeando a Roman
Polanski (Rosemary's Baby) y a Stanley Kubrick (The Shining) de paso y que es una película sobre brujas, pero no
desesperes a la audiencia con frases muy manidas en todas tus otras películas.
Fue
una gran decepción y no siento que esta película sea la prueba de fuego para
los dizque fans acérrimos de Rob Zombie
(dicha prueba de fuego la aplicó Lady
Gaga con su Born this way... ese
tipo de magnitud es de la que hablo y la cual ''se supone'' recurre el
director/guionista).
Es
una pena que Sheri Moon no sea
llamada por otros directores ni idealizada por otros realizadores para
protagonizar alguna película que NO SEA DE SU AMADO ROB. Ella es lo que Milla Jovovich es para Paul W. Anderson o Helena Bonham-Carter es para Tim
Burton. Por mencionar ejemplos actuales y digeribles.
El
final se siente atropellado. Realmente sonaba más interesante la película
gracias a la sinopsis… ¿Dónde carajos quedó eso de que los demás escuchaban una
canción genial y electrónica mientras que Heidi escuchaba torturas y lamentos?
La llegada de ‘‘The Lords’’ no es tan
épica ni cacareada como la pintaban en el resumen del largometraje. Ni siquiera
en la trama pinta como la cúspide de todo lo mostrado.
No
es visceral como The Devil’s Rejects,
no ostenta una fotografía digna de alabar como Halloween 2 (Rob Zombie, 2009), no da un giro de 360° como el
remake de Halloween ni cuenta con
antagonistas memorables como en House of
1000 corpses. Se queda corta al lado de AHS: Coven, incluso, queda peor al lado de Hansel & Gretel: Witch Hunters (Tommy Wirkola, 2013) por la
carencia de brujas realmente atemorizantes (y no cuenta ese aquelarre con
mujeres llenas de tierra que parecen más personajes sacados de la mente de Jack Ketchum) y no figura ni siquiera una
‘‘mala malora’’ como el personaje de Emma
Thompson en Beautiful Creatures (Richard
LaGravenese, 2013). Ese momento Mujeres
Asesinas con las tres apóstatas, no ayuda ni aporta nada a la película.
Solamente
se recomendaría para saciar la sed de morbo por ver que es lo atrayente o lo
culminante en la filmografía de Rob
Zombie. Si él cree que dio mucho de sí, la verdad, se siente que lo dio
antes de este agotamiento visual. Pueden verla tranquilos sabiendo que no
asesina a ningún animal, ni mucho menos asesina a un bebé (no lo muestra). Hay
uno que otro detalle interesante sobre las brujas, pero eso queda sumergido en
las manías psicodélicas e innecesarias que abundan en este largometraje. Ojalá
volviera al universo de Michael Myers
o de una jodida vez dirija el que sería segundo remake de The Blob (Irvin S. Yeaworth Jr., 1958).
5/10
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